Luis Castillo seguirá tirando ‘fuego’ a los bateadores
Al Hecho. | Al lanzador dominicano Luis Castillo, de los Rojos de Cincinnati, quien debutó en Grandes Ligas en 2017, le tomó un poco más de tiempo establecerse como un hombre estable e importante para un “staff” de picheo. Pero finalmente Luis ha visto cristalizar su meta en base a trabajo, esfuerzo y dedicación.
Desde la segunda mitad de 2018, ha habido pocos abridores mejores que el fuerte tirador derecho, nativo de Baní, al sur de República Dominicana. Su buen trabajo lo evidencia el hecho de su escogencia para el recién celebrado Juego de Estrellas.
Y es que Castillo, a quien apodan ‘la Piedra’, ha seguido brillando en la rotación de Cincinnatieste año.
De hecho, el llegó a la pausa del Juego de Estrellas con el segundo mejor promedio de carreras limpias en las Grandes Ligas (2.29), superado en ese sentido solo por el zurdo Hyun-Jin Ryu, de los Dodgers, abridor de la Liga Nacional en el clásico de mitad de temporada, en Progressive Field de Cleveland. “Mente positiva, trabajar duro”, dijo Castillo, de 26 años de edad.
“Esos son los resultados que te llegan, mientras tú te traces metas. Hay que poner tu mente lo más positiva que tú puedas”.
Johnson, su tutor
Un elemento positivo para Castillo ha sido encontrarse con el coach de picheo de los Rojos Derek Johnson. Usando su buen cambio de velocidad combinado con su recta, Castillo lleva 10.5 ponches por cada 9.0 entradas, rumbo a un récord de 8-3 durante la campaña, en la que incluso fue el abridor de los Rojos en el Día Inaugural.
“Creo que tomó un paso hacia saber quién es de verdad”, dijo Johnson. “Pienso también que abrir en el Día Inaugural tal vez le haya dado algo de confianza. Cuando le dimos esa responsabilidad, no tenía precio su mirada”.
— Concentración
“El enfoque mío es la consistencia cuando estoy pichando”, expresó Castillo, quien anoche enfrentaba a los Cachorros de Chicago. “Cada año te esfuerzas para conseguir objetivos y tener esa experiencia”.
8-3 Es el récord de Castillo.
Quien busca seguir siendo consistente en la segunda mitad y tener gran temporada.