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Los Clippers reclaman el trono de la NBA tumbando a los Warriors

Al Hecho. | La vida en La Bahía llevaba cinco años siendo sorprendentemente plácida. Victorias por doquier, presencia continua en las Finales, y un trío de anillos han permitido a los  convertirse en historia de la NBA, pero esta temporada todo apunta a que las cosas van a cambiar. Se ha ido Durant, no está Klay (quién sabe por cuánto tiempo), y la plantilla es mucho más corta de lo habitual, lo que hace que sean varias las franquicias que sueñan con arrebatar a los de Kerr el rol de equipo a temer. Una de ellas son los , que se han colocado como grandes aspirantes a ocupar dicha posición tras imponerse a Golden State por 122-141.

Los de Doc Rivers dejaron claro que no hacen prisioneros. Tras derrotar a los Lakers, para muchos el otro gran favorito, en la jornada inaugural, los angelinos apalizaron a los Warriors en su estreno oficial en el nuevo Chase Center, que vio a los suyos probar de la medicina que tantos años llevan aplicando a sus rivales. Los Clippers fueron amos y señores del partido, llegaron a ganar por hasta 31 puntos, y ni siquiera tuvieron que forzar a sus estrellas para ello. Sin duda, las cosas han cambiado.

Otro triunfo de equipo

Si el resultado es de por sí un enorme golpe sobre la mesa, lo es más si tenemos en cuenta que los de Los Ángeles esperan aún a Paul George y que no necesitaron forzar en absoluto a . El alero disputó solo 21 minutos, en los que tuvo tiempo de convertir sendos 21 puntos, de repartir 9 asistencias y de capturar 5 rebotes, y volvió a convertirse en la pesadilla de los Warriors tras arruinarles el three-peat en las pasadas Finales.

Sin embargo, esta vez hubo tiempo para que todos brillasen. De hecho, el máximo anotador de los visitantes fue , con 22 puntos, que lideró como de costumbre una segunda unidad temible. A su lado, su inseparable  se fue hasta los 18 tantos, ayudando así al banquillo angelino a sumar ni más ni menos que 68 puntos.

De hecho, el equipo ha alcanzado un estado en el que incluso puede resucitar a los “muertos”. Patrick Patterson, a quien el tiempo había convertido en un hombre con quien rellenar el banquillo y poco más, firmó en su primer partido con los Clippers su récord personal de triples con un 6/10, lo que le permitió alcanzar los 20 puntos por primera vez desde febrero de 2014. Y es que cuando las cosas van rodadas, todo sale.

Debut aciago

Todo lo contrario ocurrió en los locales, que se vieron desdibujados como nunca. Ni siquiera , llamado a tirar del carro a medida que el equipo se va haciendo y Klay Thompson se va recuperando (si es que ocurre antes de final de año) estuvo al nivel esperado, y de hecho vivió una noche particularmente desacertada. El base se quedó en 23 puntos y 4 asistencias tras fallar nueve de sus 11 intentos desde el triple, desastre que se hizo aún mayor al cometer 8 pérdidas de balón.

Su nuevo compañero de backcourt, D’Angelo Russell, tuvo una estadística algo más pulida, pues acabó con 20 tantos y 8 asistencias, pero vivió en sus propias carnes los peores minutos del equipo sobre la cancha. De hecho, su presencia en el parqué se saldó con un -35 para los suyos, dato que comparte con , quien tampoco brilló precisamente y se fue con 11 puntos y 4 rebotes.

Lo cierto es que, al margen de las estrellas, muchos integrantes de la plantilla cumplieron, incluso superaron lo que a priori se les puede y debe exigir de aquí en adelante. Glen Robinson III su fue hasta los 13 tantos, y Eric Paschall y Jacob Evans alcanzaron ambos los 14 puntos, cifra a la que cuesta imaginarles llegando de forma regular. Es cierto que un solo partido ante el nuevo gran favorito para el anillo no es un periodo lo suficientemente amplio como para establecer juicios definitivos, pero es también cierto que no hacía falta llegar a este encuentro para afirmar que estos Warriors van más justos que nunca. Veremos si a medida que Curry se vaya encontrando a sí mismo el equipo puede ir escalando en sensaciones, pero por ahora no invitan precisamente a soñar.

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