López Obrador: “EE UU tiene disposición al diálogo”
Al Hecho. | Andrés Manuel López Obrador mantiene su apuesta en el diálogo para llegar a un acuerdo con Estados Unidos, después de que Donald Trump amenazara el jueves con imponer aranceles a las importaciones mexicanas si este país no pone freno a la inmigración, principalmente de centroamericanos. El presidente mexicano aseguró este sábado en una comparecencia en el puerto de Veracruz que “hay disposición del Gobierno de Estados Unidos a dialogar”, aunque afirmó que de no alcanzarse un arreglo México “tiene derecho a acudir a tribunales internacionales”. A nueve días de que se cumpla el plazo anunciado por el mandatario estadounidense para la imposición de un arancel general de 5%, las expectativas están puestas en la reunión que el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, sostendrá el miércoles con su homólogo estadounidense Mike Pompeo. Ebrard viajó el viernes a Washington de emergencia tras el ultimátum de Trump. Ese mismo día se comunicó por teléfono con Pompeo y con el asesor de la Casa Blanca, Jared Kushner, quien ha servido de interlocutor con la Administración de López Obrador. Este sábado, Ebrard comenzó a preparar la cumbre con parte de la delegación mexicana en la embajada en Washington.
“Hay disponibilidad de parte de los funcionarios del Gobierno de Estados Unidos para establecer un diálogo y llegar a acuerdos y compromisos”, dijo López Obrador en Veracruz. “Este es un primer paso, diría yo que favorable, porque no hay cerrazón, no hay la intención de desechar la posibilidad de llegar a un acuerdo para que no se apliquen estos impuestos a las mercancías de México en Estados Unidos”. Trump anunció a última hora de la tarde del jueves que impondría a partir del 10 de junio un arancel del 5% a todos los productos importados desde México, un gravamen que aumentaría hasta el 25% si el Gobierno mexicano no toma medidas para controlar el flujo de los sin papeles que llegan a territorio estadounidense a través de la frontera. El anuncio de Trump hizo temblar la Bolsa mexicana, que el viernes cayó en torno al 1,4% y el peso mexicano se devaluó un 2,5% frente al dólar. La amenaza tendría consecuencias impredecibles para la economía mexicana, muy dependiente de la relación comercial con su vecino del norte. “Las empresas van a tener que aumentar precios y de manera indirecta esto pegará a la canasta básica, principalmente vestidos, calzado y alimentos. El productor va a trasladar ese arancel a otros insumos que vende al mercado interior”, advirtió el viernes a este periódico el economista Ignacio Martínez, profesor de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
López Obrador reaccionó al ultimátum de Trump con un llamado a la calma, aunque movilizó a su diplomacia para lograr un acuerdo. “Nos conviene a todos que haya un arreglo, que no se apliquen estas medidas y que podamos ayudar nosotros en todo lo relacionado con el fenómeno migratorio sin desatender las causas que originan este fenómeno, esta situación tan vergonzosa por la que muchos centroamericanos por necesidad, por hambre, por violencia, se tienen que echar a andar para buscarse el pan, para vivir sin temores, sin miseria”.
Aunque el mandatario mexicano mantiene todos sus esfuerzos por lograr un acuerdo en la cumbre de Washington, también afirmó que México podría acudir a instancias internacionales de no alcanzarse un pacto. Una medida que, sin embargo, dijo que espera no tomar. “No renunciamos a ese derecho, pero apostamos por el diálogo y a llegar a un acuerdo con compromisos. Eso es lo principal. No estamos en plan de amenazar. Creemos en el diálogo y en la política, que es también negociación. Esa es nuestra apuesta”.