Candidatos al MVP de la NBA 2019-20
Al Hecho. | Una temporada apasionante está a punto de empezar y la lucha por ser el mejor entre todas las estrellas de la NBA se vislumbra encarnizada. Hoy repasamos a esos jugadores con potencial para ser el MVP de la temporada regular 2019-20. Algunos ya lo han sido, otros se quedaron muy cerca, y tampoco faltan los que se han ganado esta consideración en las últimas campaña. Tomando como referencia la evolución de todos ellos y cómo se ha desarrollado el mercado de la NBA, hemos seleccionado a quienes deberían estar más cerca de lograr ser elegido como el mejor del año. A continuación, diez jugadores que podrían llevarse el MVP durante la temporada 2019-20 en la NBA.
Giannis Antetokounmpo (Bucks)
Cómo no empezar por el actual MVP. El jugador griego llega al curso 2019-20 con un año más de experiencia y con el deseo de ser aún mejor. La eliminación ante Toronto Raptors le dolió muchísimo y quiere resarcirse haciendo que su juego evolucione. Su espectacular físico y capacidad para pasar por encima de los rivales (literalmente) le dan una espectacularidad difícil de alcanzar por sus rivales en esta carrera, pero es justo en esa determinación a ser mejor –anuncia evolución en el triple– la que puede hacerle aún más grande.
Contando con que Milwaukee volverá a tener un gran récord al terminar el curso –Toronto y Boston se han debilitado–, el único escollo para The Greek Freak puede ser que sienta cierta presión. Señalado como el mejor hace escasos meses, el hecho de que todos esperen que los Bucks dominen y que él brille incluso más que hace un año, puede poner un peso excesivo sobre sus hombros. Aunque claro, la realidad es que hasta el presente eso le ha importado poco, y es que lleva seis temporadas en la NBA y en todas ellas ha ido mejorando sus números en puntos y rebotes –el curso pasado fueron 27,7 puntos y 12,5 capturas–. Poco más que decir. Complicado parece que no esté entre los tres finalistas al premio si mantiene evolución y el equipo sigue ganando, .
James Harden (Rockets)
MVP de 2018 y para muchos quien merecía serlo en 2019. Si hablamos de jugadores vistosos y que lidian cada noche con la imaginación proyectada en un videojuego, James Harden está en la lista. Velocidad, tiro, movimientos con sello propio… Simplemente es un jugador diferente. El año pasado, pese a promediar la barbaridad de 36,1 puntos, quedó en segunda posición. “Las cosas que estaba haciendo en pista eran legendarias”, comentó hace poco aún incrédulo. Ahora llega otra oportunidad.
Con Russell Westbrook a su lado, Harden está nuevamente enfocado a ser campeón por encima de cualquier otra meta, pero no por ello deja de ser un candidato firme a ser el mejor entre los mejores. ¿Podrá repetir los guarismos del año pasado? Parece imposible, pero puede que no le haga falta. Ahora le tocará repartir esfuerzos y tiros con Westbrook, pero de igual manera puede darse el caso de que sea ello lo que le lleve a ser MVP como en 2018. Aquella campaña jugó genial, pero fue el hecho de ganar 65 partidos en temporada regular lo que terminó por decantar la balanza a su favor. Resumiendo: con menos puntos puede estar más cerca.
LeBron James (Lakers)
LeBron James ha recuperado la sonrisa y eso es peligroso, para sus rivales. Hace algo más de doce meses llegaba a los Lakers para ganar, pero chocó frontalmente con una realidad que le dejó fuera de playoffs por primera vez desde 2005. Ahora todo es ilusión. Ha arribado Anthony Davis para formar junto a él una pareja letal y el techo de los de oro y púrpura no se ve por debajo del escalón más alto del podio. Con ese escenario, se espera a El Rey en su mejor versión, esa que vive bordeando el triple-doble noche sí y noche también, y que puede llevar a los suyos a conseguir uno de los mejores balances de la competición.
Al otro lado de la balanza, el de los frenos de cara a hacerse con el premio, puede situarse el compartir protagonismo con Anthony Davis… o no. Todo dependerá de cómo se entiendan. Por supuesto que ambos realizarán menos tiros que por separado, pero si se mantienen a un alto nivel pueden hacer que justo por eso, por repartir el peso, ambos vean multiplicada su eficiencia. En cualquier caso, no incluir a LeBron entre los candidatos sería un sacrilegio.
Anthony Davis (Lakers)
Mismo caso de LeBron James, pero con matices. A nadie escapa que Anthony Davis tiene cualidades de sobra para ser un potencial MVP de la NBA, pero el hecho de jugar junto a El Rey puede ser tan positivo a nivel global como hasta cierto punto perjudicial para esta aspiración. Damos por hecho que los números de La Ceja serán espectaculares, pero si estos se suman a un gran desempeño de LeBron y a un buen balance del equipo, es bastante más probable que el premio sea para el ganador de tres anillos.
¿Dónde puede estar la oportunidad de Davis? En tomar el mando del equipo en algún momento de la temporada. Por supuesto ni hablamos ni queremos que James sufra lesión alguna, pero ese puede ser el matiz que marque la diferencia para el ala-pívot. Si durante algunas semanas queda al frente de la nave y esta mantiene el buen rumbo mientras su juego es bestial, ahí puede abrir una puerta para ser condecorado como el mejor jugador de la temporada.
Joel Embiid (76ers)
Para empezar, quiere ser MVP. Joel Embiid sabe qué jugador es y hasta qué punto puede marcar las diferencias entre los mejores. El curso pasado ya estuvo en unos impresionantes 27,5 puntos, 13,6 rebotes, 3,7 asistencias y 1,9 tapones. Jugar mejor va a ser difícil –no queremos provocarlo–, pero quizás el gran paso para él no esté tanto en ir más allá en tales guarismos, sino en que el rendimiento global crezca. Justo ahí es donde se centra. Cuestionado hace poco por la nueva campaña que se avecina, aseguró que quería cambiar su carga de trabajo para ir de menos a más durante el año y pelear por el primer puesto de le Conferencia Este. Si lo consigue, estará muy cerca.
Y es que Embiid no es solo baloncesto. El jugador de Philadelphia 76ers tiene un carisma que engancha al público a la vez que una historia de superación que pocos podrán protagonizar. Dos años en blanco tras ser elegido en el Draft para después saltar a la cancha y deslumbrar hasta al más escéptico. Físico y clase a partes iguales para pelear por el el MVP de 2020.
Stephen Curry (Warriors)
A nadie escapa que la llegada de Kevin Durant a Golden State Warriors supuso un paso atrás por parte de Stephen Curry. Siguió anotando triples desde su casa y haciendo jugadas que provocan ovaciones, pero a fin de cuentas sus estadísticas y rol protagonista sufrieron un recorte. Más claro, el año antes de la llegada de KD se fue hasta los 30,1 puntos por noche. Un año después estaba en 25,3.
Algunos podrán argumentar que tiene ya 31 años y que su mejor momento, el que llevó a lograr dos MVP consecutivos, ha pasado; pero no es así. Cuando se le ha exigido, como en los playoffs pasados, ha respondido con su mejor versión, esa a la que se le caen los puntos de las manos. En poco más de diez días, sin Durant en el equipo y con Klay Thompson lesionado de larga duración, llegará el momento de ver hasta qué punto está preparado para multiplicar su producción. Eso sí, no debemos obviar que a su lado estará D’Angelo Russell. La complicidad entre ambos puede ser un factor determinante.
Kyrie Irving (Nets)
Un nuevo comienzo. Los años en Boston Celtics han estado lejos de ser lo que Irving y los aficionados verdes esperaban. Kyrie ha seguido jugando a buen nivel, pero el equipo se fue desmoronando primero con las lesiones –Gordon Hayward y él no estuvieron en los primeros playoffs– y en la temporada recién finalizada por una falta de química que se hizo más que patente sobre la pista. Boston tenía la mejor plantilla desde su último anillo y no fue capaz de pasar la segunda ronda, y claro, todas las miradas apuntaron al base, quien debía ser el líder del equipo.
Ahora tiene la oportunidad de redimirse y demostrar que puede ser el jugador sobre el que se cimente un proyecto ganador. En Cleveland ese peso recaía sobre LeBron James y se ganó. En Boston estaba sobre sus hombros y no se pudo. Claro está que sin Kevin Durant –no jugará en toda la temporada– el salir vencedor se antoja imposible. Pero justo por ello, por estar ‘solo’, debe dar su mejor versión e ir creando el camino que le lleva al éxito individual y colectivo. En cuanto a sus números, cuestión que pesa y mucho en este premio, el poder abarcar más balón sin KD puede empujarle a estar en la pelea.
Nikola Jokic (Nuggets)
El toque balcánico de la lista. Nikola Jokic busca su confirmación entre las súper estrellas de la NBA con el objetivo de consolidad igualmente a los Denver Nuggets en la élite de la Liga. Clase le sobra. Pases sin mirar, canastas desde todas partes… El espectáculo está asegurado con el serbio. Cuestión diferente es que el aumento de nivel de la Conferencia Oeste –Lakers y Clippers van a por todas– le perjudique respecto a que los resultados del equipo estén bastante por debajo del curso pasado, cuando acabaron en la segunda posición.
A título individual hay menos dudas. Con 24 años viene de firmar en la campaña 2018-19 20,1 puntos, 10,8 rebotes y 7,3 asistencias. Sí, hablamos de un jugador de 2,13 metros que vive cerca del triple-doble. Y la pregunta es: ¿aún puede mejorar? Sería tremendo. A estas alturas ya es All-Star y uno de los grandes talentos de la NBA. Dar un paso más y a su vez hacer funcionar a los de Colorado puede acercarle al gran premio.
Kawhi Leonard (Clippers)
El año pasado sorprendió a todos tras un año sin jugar y de cara a la campaña 2019-20 no hay motivos para que no siga haciéndolo. A sus 28 años se encuentra en el mejor momento de su carrera en cuanto a madurez y plenitud física, y por si fuese poco jugará en casa, ya que ha cumplido su deseo de retornar a Los Ángeles. En su debe quizás esté el que sea un jugador serio –sus sonrisas se cotizan al alza– y que quizás por su juego y personalidad no sea el jugador que más vende, pero si hablamos de números, eficiencia e impacto en un equipo, sin duda tiene que estar en cualquier discusión.
Porque Leonard llega de ponerse el anillo con Toronto Raptors y parece decidido a seguir cosechando éxitos. En los dos campeonatos que ha conseguido –uno con los canadienses y otro con San Antonio Spurs en 2014– ha sido nombrado MVP de las Finales; es decir, haciendo una cuenta simple a su palmarés le falta el ser nombrado mejor jugador de una temporada regular. Por supuesto que no será su objetivo. Leonard quiere llegar en plenitud física al último día, e incluso desde los Clippers han dejado entrever que cuidarán sus descansos incluso más que en Toronto –disputó 60 partidos en regular season–. Puede que esa limitación le perjudique, pero si brilla como en Canadá bajo los focos de Hollywood, apuesten a que estará en la discusión.
Damian Lillard (Trail Blazers)
Como cada año, Damian Lillard y su equipo, Portland, se acercan al inicio de la temporada en un segundo plano. Da igual que metiese aquel triple desde su casa para sentenciar a Oklahoma. Da igual que llegasen a las Finales de la Conferencia Oeste el año pasado. Da igual que hayan reforzado el equipo con piezas interesantes. El sino de Lillard es ser infravalorado.
Y justo por ello está aquí, porque un jugador que ha mantenido en la élite a un equipo que no hace tanto perdió a cuatro de sus cinco titulares (todos a la vez) está hecho de otra pasta. No vamos a descubrir a Lillard, sus números y su capacidad para hacer ganar a su equipo son innegables. Pero… ¿podrá dar un paso más? He ahí la gran pregunta. Ante un curso en el que la lucha del Oeste se vaticina encarnizada, verle dar un golpe sobre la mesa ante Clippers, Lakers, Rockets o Jazz podría ser determinante. Y por supuesto, deberá contar con que a nivel colectivo sumen muchas victorias.