Evaluación Miriam Germán, cargada de cuestionamientos
Al Hecho. | La primera sesión de evaluación en la historia del país de jueces de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) por parte del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) se vio fuertemente caldeada y cargada de tensión cuando le tocó el turno a la actual presidenta de la Sala Penal de esa alta corte, Miriam Germán Brito, ya que durante el período de preguntas y respuestas que le correspondió a ella, el procurador general de la República, Jean Alain Rodríguez, en su condición de miembro del órgano, le leyó varias cartas anónimas en las que a la magistrada le hacen una serie de imputaciones.
Dentro de estas, está la amistad que la une al exfuncionario Víctor Díaz Rúa, con quien, según la carta anónima, se reunió secretamente luego de que ésta fuera objetada por ese vínculo cuando Díaz Rúa fue imputado en el caso Odebrecht. A esto, la jueza respondió que es cierto tiene un lazo de amistad con el exfuncionario, que nunca lo ha negado y que también es verídico que se visitan como amigos, aunque no tan constante como antes.
Otra de las cartas leídas por el procurador versaba sobre una cantidad de propiedades que “presuntamente” tiene Germán Brito y que a juicio del anónimo, la magistrada no puede justificar por el salario que percibe y que además, no figuran en su declaración de bienes. Dentro de esas propiedades, mencionó una villa en San José de Ocoa, un apartamento y otros inmuebles, en las cuales alegadamente utiliza a su hijo de testaferro, “cuando este nunca ha trabajado y no puede tampoco justificar los bienes”.
Ante esto, la jueza dijo que esos bienes lo han adquirido por la venta de propiedades del padre de uno de sus cuatro hijos.
El escenario se convirtió en un campo de preguntas y respuestas de Miriam Germán Brito y Jean Alain Rodríguez. La magistrada contestó al procurador con frases como “De este puesto me voy como salí. Si esto fuera de dos vías, habláramos de usted”; “Yo hace tiempo que aprendí que los demás tratan a uno no como uno es, sino como ellos son”. “¿Sus agentes especiales no llegaron ahí?”, preguntó en algún momento la magistrada al procurador alegando que esas eran cosas que debieron investigar.
Presidente Medina hace salvedad
En medio de las interrogantes, el jefe de Estado Danilo Medina, en su condición de presidente del CNM, le reiteró varias veces a la magistrada que no debía responder a las preguntas si no quería, pero la jueza siempre se mantuvo refutando, aunque hubo un momento en que dijo: “No le respondo ninguna más a ese señor (al procurador)”.
El enfrentamiento de palabras inició cuando el titular del Ministerio Público, en su condición de miembro del CNM, pidió un turno para preguntar a la jueza y en ese momento aprovechó para decir que presentaría esos documentos y que, era decisión de Germán Brito responder o no, tal como había indicado el jefe de Estado Danilo Medina, presidente del CNM al inicio de la jornada.
La primera carta anónima
La primera carta anónima leída por el procurador decía lo siguiente: “Distinguidos señores, como ciudadano, preocupado por el curso que están tomando en nuestro país los procesos de la corrupción y los casos sonoros que muestran políticos y a empresarios, veo con gran inquietud que sean confirmados como jueces personas que, a mi entender, no se han comportado con la ética y transparencia propia de juez de la Suprema Corte de Justicia. Me refiero a la eventual posibilidad de que la magistrada Miriam Germán se presente nuevamente como aspirante a su cargo en la Suprema Corte de Justicia.
Antes de presentar los hechos y las denuncias, debo primero recordar que en 2017, justo antes de iniciar con los imputados del famoso caso Odebrecht, se difundió en las redes sociales y algunos medios de comunicación, la versión de que la magistrada Miriam Germán Brito sostenía frecuentes reuniones con el imputado Víctor Díaz Rúa en su villa de San José de Ocoa. Posteriormente, la magistrada Miriam Germán reconoció, mediante comunicación en fecha de 23 de mayo del 2017 que fue publicada en todos los medios, el tema de relación de amistad con Díaz Rúa y pidió que en caso de que el llamado caso Odebrecht llegue a la Suprema Corte de Justicia, no se le considerara para ninguna participación, ni como juez de instrucción especial o como miembro delpleno, expresando la magistrada que esa decisión no tenía marcha atrás y que se consideraba excluida de todo lo relativo al proceso que dio origen a su comunicación. Al ser amigos reconocidos, esa era la decisión correcta. A pesar de haberse autoexcluido de forma irrevocable del proceso, posteriormente la magistrada Germán Brito, de manera sorpresiva, viola sus propias palabra, y participa en ese mismo caso en las audiencias de Odebrecht que hasta varió la prisión preventiva impuesta por el magistrado Francisco Ortega y puso en libertad a casi todos los imputados por corrupción, recordando que la magistrada Germán en ese juicio votó disidente, pidiendo la libertad de todos los imputados de corrupción, incluyendo la libertad de Víctor Díaz Rúa.
En esa audiencia que decidió no participar y que liberó parte de los imputados, la magistrada Germán Brito calificó extemporáneamente de débil el expediente del caso, vertiendo consideraciones propias de un abogado de la defensa de los imputados, lo cual es extraño, pues el expediente había sido depositado dos días antes en el tribunal, pero había sido subido unas horas antes a su oficina, lo que es totalmente imposible que ella pudiera haber leído un expediente de miles de páginas en dos horas y preparar un documento concluyendo que se trataba de un expediente débil. Esos mismos argumentos casualmente fueron utilizados también por los abogados de los imputados como si fuera una estrategia conjunta.
Expuesto lo anterior, y por la gravedad del hecho aquí viene mi denuncia y preguntas: Le ruego magistrado preguntar, ¿por qué en el caso más grande de corrupción de nuestro país, la magistrada Miriam Germán continúa sosteniendo reuniones ocultas con el señor Víctor Díaz Rúa? y de manera especial, por favor, pregúntele si ¿es cierto que el día 5 de febrero del 2018 aproximadamente a las 6:30 P.M. el señor Fernando Haché, asistente de Víctor Díaz Rúa, pasó recogerla de forma clandestina por su casa a bordo de un Toyota Camry negro placa A695832 y hacia dónde fue?, pregúntele si en medio de todo este escándalo se reunió con el imputado Víctor Díaz Rúa en la torre Mariventus, en la calle Núñez y Domínguez, por espacio de dos horas en el apartamento 9B propiedad de Víctor Díaz a través de una de sus empresas. Nos interesa saber qué conversaba el imputado Víctor Díaz Rúa para quien pidió libertad. Y si todo esto fuera poco, pregunte, por favor, si el 22 de noviembre del 2017 a las 2:00 P.M. si se reunió o no también con el licenciado Santiago Rodríguez, íntimo amigo de Díaz Rúa y abogado del imputado Conrado Pittaluga en la librería Cuesta de la avenida 27 de Febrero. También pregúntele por qué el chofer de la magistrada Miriam Germán, el señor Paúl Ricardo Smith, le lleva documentos al abogado del imputado Conrado Pittaluga, licenciado Santiago Rodríguez, a una oficina ubicada en la calle Juan Sánchez Ramírez, esquina Benito Monción, en Gascue. Magistrado, soy responsable de mis denuncias y para el caso de que la magistrada Germán se atreva a negarse, aquí le remito adjunto fotos y videos de esas reuniones para que usted se las muestre a ella y al país, las cuales fueron tomadas en las vías y espacios públicos, en ejercicio de mis derechos como ciudadano. Esos son solo una muestra de las cosas que tengo documentadas.
Pregúntele por favor cómo es posible que después de ella reconocer públicamente su amistad con Víctor Díaz Rúa, se reúna con él a escondidas, utilizando vehículos de su asistente y en propiedades de testaferros de este y que pretenda juzgarlo como uno de los principales acusados de soborno y corrupción en este caso Odebrecht. Pregúntele por qué se reúne de forma conjunta con el abogado de Conrado Pittaluga en medio de este proceso. Pregúntele por favor qué le entregó su chofer en ese sobre al abogado de Conrado Pittaluga. Pregunte por favor si esa amistad es tan inocente por qué tienen que reunirse a escondidas y pregunte con qué finalidad se hacen dichas reuniones ocultas. Eso, si no es ilegal, es de poca ética y transparencia y merecemos una respuesta. Ojalá ella aclare todo esto ante el Consejo Nacional de la Magistratura”.
Refutan miembros del CNM
Al terminar la lectura de esta carta, la magistrada preguntó: ¿quién firma eso?, a lo que el procurador le respondió: “no, es anónimo y tenemos la obligación de mantener el anonimato. Como sabrán el procurador de la República tiene la obligación de mantener el anonimato, por ley así lo dispone la Ley Orgánica del Ministerio Público”.
En ese momento, intervino el senador José Ignacio Paliza, quien le dijo al presidente Danilo Medina y presidente del CNM: “Usted sí tiene los datos. Ese anónimo es de nosotros, pero usted sí lo tiene”. “Es un tema muy grave y quiero saber si usted tiene la información”.
La respuesta de Miriam fue que “en cuanto a la amistad con Víctor, la mantengo, me ha tratado con un respeto, él me visita no tan frecuente y hemos coincidido en diferentes sitios (…) yo, en el ejercicio profesional, no he sido discriminatoria con nadie, recibo a cualquier usuario, quien sea, he establecido que casi debo tener una justicia de proximidad. Yo no ando buscando a chantajistas para que digan nada de nadie, ¿algo más?”, manifestó Germán Brito en su defensa.
Segunda carta anónima
Jean Alain Rodríguez prosiguió a dar lectura a otra de las cartas que también era anónima en la que se cuestionaba la procedencia de los bienes de la jueza. Según leyó el procurador, decía lo siguiente:
“Honorable magistrado, ha salido en la prensa que la magistrada Miriam Germán pretende continuar en la Suprema Corte de Justicia. Sin embargo, con todo el respeto en su condición de ser magistrada, debe explicar al país cómo ella posee y disfruta algunos bienes que no puede justificar con el sueldo de jueza que percibe y por qué está usando a su hijo de testaferro colocando su nombre en unos bienes que él no puede justificar, pues se trata de un joven que nunca ha trabajado y que es interdicto declarado legal, del cual la magistrada Germán es la tutora formal y como tal firma las compras de este joven. Denunciamos formalmente que la magistrada Germán posee una villa en la parcela 626 del municipio de San José de Ocoa, pero la tiene a nombre de su hijo interdicto, también tiene a nombre del interdicto del apartamento 2B del residencial Manatí, en la calle Juan Sánchez Ramírez del sector Gascue. Como ciudadano y buscando transparentar sus bienes, tengo derecho a solicitar por qué esos bienes están a nombre de su hijo interdicto y queremos saber cómo generó ella dinero para construir esa hermosa villa en Ocoa y para comprar el apartamento de la capital, pero además de cuestionar que estos inmuebles siendo realmente de ella, no figuran en su declaración jurada de bienes del año 2016 y que los haya comprado ella misma, los haga figurar como si los compró su hijo interdicto que nunca ha trabajado, lo que puede constituir falsedad de declaración jurada de patrimonio y que sea descartada como juez de la Suprema Corte de Justicia, me despido esperando que usted tenga la suficiente entereza para demostrar lo aquí informado y presentar a los demás miembros del Consejo Nacional de la Magistratura”.
Tercera carta, pero de un juez
Luego de esto, el procurador Rodríguez sacó otra comunicación, pero esta vez tenía nombre. Supuestamente venía de parte del José Gregorio Bautista Vargas, juez de la Segunda Sala de Trabajo de la provincia de Santo Domingo, firmada por él mismo y decía lo siguiente:
“En atención a lo antes indicado, es decir, a la narrativa del caso del narcotraficante Risik, la conformación del Tribunal Colegiado de la provincia de Monte Plata, lo fue Juan Pablo Ortiz Peguero, presidente, García, miembro y yo José Gregorio Bautista Vargas, miembros, constituidos únicamente para conocer el proceso seguido a los imputados Winston Risik Rodríguez y Nelson Risik Delgado, que el curso de la sustentación del proceso, fue contactado y llamado por razones inicialmente desconocidas a la residencia personal de la jueza Miriam Germán Brito, actual presidenta de la Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia y por primera vez me hace una solicitud de tipo inadecuada. Ella aparentemente basada en la relación de cercanía durante siete años que laboré junto a ella en la Primera Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito, quien en todo momento me trató como un hijo. Sin embargo, nunca hasta ese momento me había solicitado algo de esa naturaleza. Que una vez allí me comenta que tiene un amigo español y que dicho amigo tiene interés en saber si se puede hacer algo con el proceso seguido al Gallero, refiriéndose con ello al imputado Winston Risik Rodríguez, palabras textuales a lo que de manera inmediata le respondo sin titubeos que no, respuesta que entendí que había comprendido y dimos por terminado el tema y procedí a marchame a mi casa, pues ella nunca me había hecho solicitudes de esa índole. Que posterior a ese día, en el mes de abril, la jueza Miriam Germán Brito, por vía de comunicación de WhatsApp procede solicitar verme por segunda ocasión, refiriéndome que tenía algo que comunicarme (…) Afirmo de manera categórica que estoy ansioso porque se evidencie la verdad del asunto y para ello me pongo a total disposición para colaborar diligencia colaborativa que deseen”
A ello, la magistrada respondió que el documento leído no se correspondía con la realidad. “Lo que él ha dicho sí es que para mí fue como un hijo, yo quise mucho a su padre que trabajamos muchas veces juntos, Julio Bautista, y no recuerdo nunca haberle solicitado nada a ese joven”, refutó.
Vicepresidenta y Castillo se quejan de maltrato
La vicepresidenta Margarita Cedeño manifestó su inconformidad por lo que califica como un maltrato recibido por la magistrada Miriam Germán durante su participación en la evaluación de jueces de la Suprema ante el Consejo Nacional de la Magistratura.
“Expreso mi total inconformidad por el maltrato recibido por la Magistrada Miriam Germán”, escribió Cedeño en su cuenta de Twitter.
Mientras la diputada Josefa Castillo, miembro del CNM, calificó esto como una burda agresión hacia la magistrada, donde se utilizó mal el anonimato.
Castillo sostuvo que fue una irresponsabilidad porque para este proceso había una parte dedicada a las objeciones, que eran antes de las evaluaciones y que todas esas imputaciones debían ser desestimadas.